Miércoles 28 de mayo del 2014
Programas # 143
Bienvenidos a su programa
APOYANDO FAMILIAS – APRENDIENDO JUNTOS
Construyendo Relaciones Positivas
Nuestros facilitadores: Lupita Montoto, Rubén Barahona y su servidora, Romilia Schlueter
Participe en el programa llamando al 321-1480 – enviando un mensaje de texto al 60193.
Escucha la primera parte:
Escucha la segunda parte:
CARTA DE UN HIJO A TODOS LOS PADRES DEL MUNDO
No me des todo lo que te pido.
A veces, sólo pido para ver hasta cuánto puedo obtener.
No me grites.
Te respeto menos cuando lo haces;
y me enseñas a gritar a mí también.
Y… yo no quiero hacerlo.
No me des siempre órdenes.
Si en vez de órdenes, a veces me pidieras las cosas,
yo lo haría más rápido y con más gusto.
Cumple las promesas, buenas y malas.
Si me prometes un premio, dámelo;
pero también si es un castigo.
No me compares con nadie,
especialmente con mi hermano o mi hermana.
Si tú me haces sentir que soy mejor que los demás,
alguien va a sufrir;
y si me haces sentir peor que los demás,
seré yo quien sufra.
No cambies de opinión tan a menudo
sobre lo que debo hacer.
Decide y mantén esa decisión.
Déjame valerme por mí mismo.
Si tú haces todo por mí,
yo nunca podré aprender.
No digas mentiras delante de mí,
ni me pidas que las diga por ti,
aunque sea para sacarte de un apuro.
Me haces sentirme mal
y perder la fe en lo que me dices.
Cuando yo hago algo malo,
no me exijas que te diga el por qué lo hice.
A veces ni yo mismo lo sé.
Cuando estés equivocado en algo, admítelo,
y crecerá la buena opinión que yo tengo de ti,
y así me enseñarás a admitir mis equivocaciones.
Trátame con la misma amabilidad y cordialidad
con la que tratas a tus amigos.
Porque seamos familia
no quiere decir que no podamos ser amigos también.
No me digas que haga una cosa
si tú no la haces.
Yo aprenderé siempre lo que tú hagas,
aunque no me lo digas.
Pero nunca haré lo que tú digas y no hagas.
Cuando te cuente un problema mío,
no me digas «no tengo tiempo para bobadas»,
o «eso no tiene importancia».
Trata de comprenderme y ayudarme.
Y quiéreme. Y dímelo.
A mí me gusta oírtelo decir,
aunque tú no creas necesario decírmelo.
Anónimo.
Preguntas para el diálogo:
1. ¿En qué le hizo pensar esta reflexión?
2. ¿Qué frase le impactó más? ¿Por qué?
3. ¿Se siente identificada/o con la reflexión?
4. ¿De qué manera educa a sus hijos?
5. ¿Cuáles son sus principales problemas frente a ellos?
6. ¿De qué manera se pueden solucionar?
- La importancia fundamental de construir relaciones positivas con los niños puede ser mejor ilustrada por los siguientes escenarios:
Helen y su hija Lucy de 30 meses de edad, tienen la tradición de ir a un parque en el vecindario durante la mañana y jugar con otros padres y sus niños. Ellas pasan entre una y dos horas cada día en el parque. Pero hoy Helen recibe una llamada de emergencia y necesita volver a su casa inmediatamente.
Ella y Lucy han estado en el parque por aproximadamente 10 minutos y Lucy está jugando «a cocinar» con su mejor amigo Tito. Helen le dice a Lucy, “cariño, lo siento pero tú y yo tenemos que irnos a casa ahora. Todo está bien, pero tenemos que irnos”. Lucy comienza a lloriquear y dice: «Pero, estaba jugando con Tito». Helen se agacha y abraza a Lucy, diciéndole: «Lo sé. Vamos a llamar a la mamá de Tito cuando lleguemos a casa y lo invito para jugar más tarde». Lucy dice, «O.K.», y ella y su mamá se dan prisa para llegar a casa.
- Eric ha sido profesor de Head Start durante 10 años. Durante ese tiempo, él ha construido una reputación como el maestro ideal para los niños difíciles. Este año, Bill está asignado al salón de clase de Eric debido a su larga historia de hiperactividad, negatividad y agresión hacia los adultos y compañeros. Después de dos meses, el administrador del centro tímidamente le pregunta a Eric cómo van las cosas con Bill. Eric le responde, «Genial, estábamos equivocados acerca de Bill”.
Algo atónito, el administrador decide ver por sí mismo. Lo que observa en menos de 10 minutos es lo siguiente. Eric les dice a todos, «miren a Bill, está sentado tranquilamente en el círculo. “¡Muy bien Bill!» Cuando Eric responde a una pregunta acerca de un cuento Eric le dice, «correcto Bill, hoy estás realmente concentrado”. Cuando la transición está a punto de ocurrir, Eric dice, “¿Bill, puedes mostrarle a todos lo bien que caminas para ir a tomar un bocadillo?” Durante la merienda un compañero le pide a Bill el jugo y él se lo da. Eric, estando atento, le dice, “Bill, gracias por compartir tan bien».
- Después de completar una evaluación del comportamiento funcional, Erin, un profesor de ECSE, determina que la historia de comportamientos de rabietas de Jessie en la clase está diseñada para llamar la atención de los adultos. Erin diseña un plan para hacer caso omiso de las rabietas de Jessie y darle tiempo y atención cuando él no esté haciendo una rabieta. Después de cuatro días de aumento en las rabietas, el comportamiento de Jessie ha mejorado dramáticamente.
En cada uno de los escenarios anteriores, los adultos tuvieron éxito en el logro de mejorar el cambio de comportamiento en contextos que muchas personas podrían predecir que los llevarían a continuar el comportamiento, e incluso a incrementar el comportamiento difícil. Sin embargo, en cada caso, los niños estaban en obvia sintonía con los adultos, enfocados en su comunicación, y dispuestos a valorar y buscar la aprobación de los adultos. En cada caso, los adultos habían invertido tiempo y esfuerzo antes de los eventos en cuestión, comunicando sin condicionar su afecto o poner en discusión la valoración de estos niños.
Consideramos que este tipo de experiencia previa en la construcción de relaciones positivas es un prerrequisito para las prácticas de intervención eficaz para el comportamiento desafiante y por lo tanto un objetivo para los adultos y proveedores de cuidados que desean evitar comportamientos desafiantes y aumentar la sensación de bienestar y de aptitud social en los niños. ¿Cómo hacemos la tarea de construcción de relaciones?
Construyendo relaciones positivas
Establecer relaciones positivas con los niños pequeños es una tarea esencial y un componente fundamental de la buena enseñanza. Todos los niños crecen y prosperan en el contexto de relaciones estrechas y confiables que proporcionan amor y cuidado, seguridad e interacciones con capacidad de respuesta. Una relación adulto-niño positiva construida sobre la confianza, fomenta la comprensión y aumenta los resultados positivos en la escuela. (Webster-Stratton, 1999).
En un examen del riesgo empírico originado con factores de protección relacionados con problemas académicos y comportamiento al comienzo de la escuela, Huffman et. al. (2000) identificaron que tener una experiencia preescolar positiva y una relación cálida y abierta con su maestra o proveedor de cuidado infantil son factores importantes de protección para los niños pequeños.
Estos factores de protección operan para producir efectos directos y paliativos para los niños en situaciones de riesgo (Luthar, 1993). A continuación, describimos algunos de los ingredientes clave para la construcción de la relación.
Lo primero es lo primero
Utilizando un modelo de construcción de relaciones, la secuencia adecuada del comportamiento del adulto es crítica. Para ponerlo de manera sencilla, los adultos tienen que invertir tiempo y atención en los niños como un precedente para el uso óptimo de estrategias de cambio de comportamiento. Hay dos razones por las que estas secuencias son tan importantes.
Primero, cabe señalar que la protección de los factores que se promovieron durante la construcción de la relación puede y cumple la función de reducir muchos de los comportamientos desafiantes. Como tal, tomarse el tiempo para construir la relación puede ahorrar tiempo que puede usarse en la aplicación de evaluaciones y estrategias de intervención más elaboradas y que requieren más tiempo.
Segundo, como adultos construyendo relaciones positivas con niños, su potencial de influencia en el comportamiento de los niños crecería de forma exponencial. Es decir, los niños captan pistas a partir de la presencia de adultos importantes y cariñosos, ellos prestan atención selectiva y diferenciadamente a lo que hacen y dicen los adultos, y buscan formas de asegurar aún más atención positiva de los adultos (Lally, Mangione & Honig, 1988).
Es ésta relación positiva la base que permitió a Helen irse del Parque temprano con Lucy con un mínimo esfuerzo, a Eric experimentar con Bill de una manera mucho más positiva que los maestros anteriores y a Erin cambiar las rabietas de Jessie en un corto tiempo.
Llegar a conocerte
Para que los adultos construyan relaciones positivas significativas con los niños, es esencial desarrollar una comprensión profunda de las preferencias, intereses, historia y cultura de los niños. Para los niños muy pequeños y los niños con necesidades especiales, ésta información se obtiene más a menudo observando lo que hacen los niños y hablando directamente con los padres y otros cuidadores. Con esta información, los adultos pueden asegurarse de que su juego con los niños es divertido, que el contenido de sus conversaciones es relevante y que se comunican respetando los orígenes de los niños. Siempre que sea posible, este tipo de información de intercambio debe ser recíproca. Es decir, los adultos deben compartir sus propios intereses, lo que les gusta, antecedentes y orígenes con los niños también.
Toma mucho amor
Para muchos niños, el desarrollo de relaciones positivas con los adultos es una tarea difícil. Los antecedentes y comportamientos negativos interfieren a menudo conspirando para hacer la tarea del desarrollo de la relación larga y ardua. Entonces, de acuerdo a la situación, los adultos deben considerar dedicar esfuerzos mayores para la construcción de las relaciones.
La forma más fácil y más sencilla es alcanzar un alto nivel de intervención en la intensidad de la construcción de relaciones pensando en incluir más oportunidades durante el día (véase la lista de abajo para sugerencias específicas). Aunque sabemos que no existe un número mágico, hemos visto a maestros que fácilmente pueden proporcionar a los niños varias docenas de interacciones afirmativas y positivas durante el día. Para los niños que a menudo han escuchado críticas, sentimos que necesitan muchísimos mensajes escuchando lo contrario.
Hacer depósitos
Una metáfora para la construcción positiva de relaciones que encontramos particularmente útil es la de una alcancía. Cuando los maestros y cuidadores participan en estrategias para construir relaciones positivas, es como si se «hiciera un depósito” en la alcancía de la relación en un niño. Por el contrario, cuando los adultos exigen, fastidian o critican a los niños, es como si se hiciera un retiro de la relación.
Para algunos niños, debido a que no ha habido ningún esfuerzo previo para realizar depósitos en sus alcancías de relación, exigir, fastidiar o criticar puede ser muy similar a escribir cheques sin fondos. Puede ser útil reflexionar sobre las interacciones con un niño y preguntarse a sí mismo, «¿estoy haciendo un depósito o un retiro?» O «¿He hecho algún deposito en la alcancía de Bill hoy?» Las figuras 1 y 2 representan ejemplos de depósitos
TALK ABOUT THE PIGGY BANK ILLUSTRATION…
Sin duda, los profesores y proveedores de cuidados para niños se esfuerzan por construir relaciones positivas con todos los niños a su cuidado. Normalmente, tenemos la mejor de las relaciones con los niños que responden, que reaccionan como nosotros y van de acuerdo a nuestros planes. Pero como usted sabe, es más difícil construir relaciones positivas con algunos niños que con otros.
Todos tenemos experiencia con niños que nos “sacan de nuestras casillas”. Tal vez exigen más atención que otros, son revoltosos, nada los motiva, nos llevan la contraria, son agresivos, o no nos dan la retroalimentación positiva que recibimos de otros. Cuando nos sacan de nuestras casillas, nos podemos sentir frustrados y desanimados, o mal con nosotros mismos como maestros, nos enojamos, alzamos nuestras voces, criticamos o activamente evitamos a esos niños.
Sin embargo, encontramos que con los niños que es más difícil construir relaciones son los que más necesitan las relaciones positivas con los adultos. Tener una reacción emocional es natural cuando esto pasa. Sin embargo, en lugar de sentirse frustrados, enojados o culpables por ello, es más productivo que pensemos en la respuesta emocional como un signo de advertencia de que tendremos que trabajar más duro para construir una relación positiva con este niño.
Si el adulto simplemente está reaccionando a una emoción, él o ella pueden constantemente sentirse frustrados o evitar al niño. Reconocemos que construir relaciones positivas con algunos niños está muy lejos de ser una simple tarea. Con frecuencia requiere un compromiso renovado y un esfuerzo constante. Porque es más fácil decirlo que hacerlo. A continuación les proporcionamos algunas estrategias prácticas para la construcción de relaciones positivas con los niños a lo largo del día en la educación preescolar.
Estrategias prácticas para la construcción de relaciones positivas
- Distribuir encuestas de interés que llenen los padres sobre sus hijos
- Saludar en la puerta a todos los niños por su nombre
- Seguir el liderazgo de un niño durante el juego
- Tener una conversación durante la merienda
- Realizar visitas (al hogar) domiciliarias
- Escuchar ideas y relatos de un niño y ser una audiencia apreciativa
- Enviar notas positivas a la casa
- Proporcionar elogio y aliento
- Compartir información acerca de usted y encontrar algo en común con el niño
- Pedir a los niños que traigan fotos familiares y darles la oportunidad de compartirlas con usted y sus compañeros
- Exhibir el trabajo de los niños
- Tenga a una «estrella» de la semana que traiga cosas especiales de casa y comparta durante el tiempo de círculo
- Reconozca el esfuerzo de un niño
- Dé elogios generosamente
- Llame a los padres de un niño para decirles qué gran día ella o él tuvo enfrente del niño.
- Averigüe cual es el libro favorito del niño es y léalo a toda la clase
- Tenga días para compartir
- Hacer libros de «todo sobre mí» y compartirlos durante el tiempo de círculo
- Escribir todas las cosas especiales acerca de un niño en una camiseta y dejar que él o ella se la ponga
- Jugar un juego con un niño
- Jugar afuera con un niño
- Ir en autobús con un niño
- Ir a una actividad extracurricular con el niño
- Aprender el idioma natal de un niño
- Dar abrazos, cincos y pulgares arriba por llevar a cabo tareas
- Tome la mano de un niño
- Llamar a un niño después de un mal día y decirle » siento que hayamos tenido un mal día hoy. ¡Sé que mañana va a ser mejor!»
- Dígale al niño cuánto se le extrañó a él o ella cuando falte un día a la escuela
Más allá de las estrategias específicas enumeradas anteriormente, sugerimos que los adultos pueden acelerar el proceso de construcción de relaciones:
• Analizando cuidadosamente el cumplimiento de cada tarea (por ejemplo, «tiempo para hacer dibujos”) y, cuando sea posible, cambiar la tarea a una opción para los niños (por ejemplo, «¿quieres dibujar o hacer rompecabezas?”)
• Examinando cuidadosamente si algunas formas de comportamiento «desafiante» pueden ser ignoradas (por ejemplo, cuando alzan la voz) — esto no significa planificar ignorar el comportamiento diseñado para atraer atención sino ignorar en el sentido de tomar decisiones buenas y limitadas acerca de cuándo elegir las batallas sobre el comportamiento; y
• Monitoreando nuestros propios comportamientos de depósitos y retiros y estableciendo objetivos de comportamientos en consecuencia.
Algunos maestros han hecho esto fácilmente mediante los contadores de muñeca de golf o moviendo un ficha de plástico de un bolsillo a otro. Un recordatorio visual estratégicamente colocado puede ayudar a los maestros a que no olviden hacer numerosos depósitos en la relación.
Conclusión
La mayor parte de este artículo se ha centrado en qué obtienen los niños de las relaciones positivas con los adultos. Sin embargo, nosotros sostenemos que los adultos también obtienen algo valioso del tiempo y la atención que emplean para construir estas relaciones significativas.
En primer lugar, como se mencionó anteriormente, los niños con los que construimos relaciones serán educados más fácilmente, más compatibles y tendrán menos probabilidades de presentar un comportamiento desafiante.
En segundo lugar, los maestros se sentirán más positivos acerca de sus conocimientos y esfuerzos – y creemos que les gustarán aún más sus empleos.
En tercer lugar, los adultos empezarán a ver el «efecto multiplicador» de la construcción de relaciones. Conforme los niños aprendan en el contexto de las relaciones afectuosas con los adultos, serán más expertos en la construcción de relaciones positivas con otros niños.
Por último, proporcionarle a un niño la oportunidad de tener una relación cálida y sensible con usted significa que usted tiene el placer de llegar a conocer al niño también.
Esto es todo por hoy, gracias por su participación, les esperamos el próximo miércoles a las 11:00 de la mañana para juntos….
¡APRENDER Y CRECER!
REFERENCIAS
Hoja informativa H01.8. Primera Sesión, Entrenamiento de la Pirámide de Desarrollo Socioemocional: Construyendo relaciones positivas con niños pequeños – Dr. Gail E. Joseph, y Dr. Phillip S. CEPA – Centro de Pruebas Basadas en las Prácticas para el Aprendizaje Temprano Universidad de Colorado en Denver.