CONSTRUYENDO FAMILIAS FUERTES
Miércoles 11 de mayo de 2016
Programa # 240
Bienvenidos a su programa
APOYANDO FAMILIAS – APRENDIENDO JUNTOS
Con su servidora, Romilia Schlueter, Lupita Montoto y José Flores.
(Invitación a las llamadas)
Escucha:
Bloque 1: APOYANDO FAMILIAS
☆ La pregunta de hoy: ¿Cuál es el regalo más valioso que puede dar una madre?
- La Vida – Marina Bautista
- El amor – Nereida Martinez
- La atención – Alma Sotelo
- La paciencia y los consejos – Maribel Perez Trejo
- Paciencia y amor – Lorena Flores
- Todo es importante pero, el tiempo – Leticia Guevara
- Cariño, abrazos, amor, protección – Estela Gómez
- La vida – Sandra Olayo
- La comprensión y el perdón – Teresa Avilló
- Enseñar los valores y el respeto – Fabiola Gutierrez
Poema del día: Las manos de mi madre, por Alfredo Espino
Manos las de mi madre, tan acariciadoras,
tan de seda, tan de ella, blancas y bienhechoras.
¡Solo ellas son las santas, solo ellas son las que aman,
las que todo prodigan y nada me reclaman!
¡Las que por aliviarme de dudas y querellas,
me sacan las espinas y se las clavan en ellas!
Para el ardor ingrato de recónditas penas,
no hay como la frescura de esas dos azucenas.
¡Ellas cuando la vida deja mis flores mustias
son dos milagros blancos apaciguando angustias!
Y cuando del destino me acosan las maldades,
son dos alas de paz sobre mis tempestades.
Ellas son las celestes; las milagrosas, ellas,
porque hacen que en mi sombra me florezcan estrellas.
Para el dolor, caricias; para el pesar, unción;
¡Son las únicas manos que tienen corazón!
(Rosal de rosas blancas de tersuras eternas:
aprended de blancuras en las manos maternas).
Yo que llevo en el alma las dudas escondidas,
cuando tengo las alas de la ilusión caídas,
¡Las manos maternales aquí en mi pecho son
como dos alas quietas sobre mi corazón!
¡Las manos de mi madre saben borrar tristezas!
¡Las manos de mi madre perfuman con terneza!
La ciencia y nuestros maravillosos cerebros:
Algunos estudios demuestran que el cerebro de la madre se encoge literalmente durante el embarazo. Pero parece ser que este “encogimiento” ayuda a la reestructuración del mismo, pues aumentan considerablemente las conexiones neuronales en áreas como el hipocampo (centro dedicado a la memoria emocional).
Todas aquellas estructuras que se dedicarán al comportamiento maternal, básicamente situadas en el sistema límbico (lo que algunos llaman cerebro medio), realizarán un cambio gigantesco: allá donde habían carreteras, ¡se construirán verdaderas autopistas! El cerebro de la madre se prepara para asumir la responsabilidad de garantizar la supervivencia del nuevo ser.
Hace poco, un grupo de investigadores asiáticos descubrió que las células del bebé en formación pasan al cerebro de la madre y lo regeneran. Este sorprendente descubrimiento abre un abanico de preguntas y posibilidades. En nuestro entorno, en la Universidad de Navarra, se publicaron hallazgos parecidos que daban a conocer una base biológica al vínculo materno-filial. Seguramente se necesitará más investigación para profundizar sobre estos mecanismos. Pero, de momento, si el cerebro se regenera de alguna forma, la madre no será menos inteligente.
¿Cierto o falso?
El tener que balancear las exigencias del trabajo, el hogar y otras responsabilidades causa que muchos padres se sientan que no tienen tiempo suficiente para estar con sus hijos. Sin embargo, pequeños actos de cariño, protección y cuidado—un abrazo, una sonrisa o palabras cariñosas— hacen una gran diferencia para los niños.
Definitivamente……. ¡Cierto!
Las investigaciones demuestran que los bebés que reciben una crianza afectiva y cariñosa de sus padres (un factor de protección a nivel relacional) tienen las mejores expectativas de crecer a ser niños, adolescentes y adultos felices, saludables y que poseen factores de protección a nivel individual como habilidades relacionales, de autorregulación y para resolver problemas.
Las investigaciones también demuestran que mantener una relación constante durante los años de formación con un adulto comprensivo se asocia con mejores notas académicas, comportamientos saludables, más interacciones positivas con los pares y una habilidad incrementada de lidiar con el estrés más adelante en la vida.
Los cerebros infantiles se desarrollan de mejor manera cuando proveedores de cuidado estables se preocupan por entender y satisfacer las necesidades de un bebé de tener amor, afecto y estímulo. A la inversa, la crianza negligente y abusiva puede tener un efecto negativo sobre el desarrollo del cerebro.
La falta de contacto o interacción con un proveedor de cuidado puede cambiar la química del cuerpo de un bebé y resultar en una reducción de las hormonas de crecimiento necesarias para el desarrollo del corazón y del cerebro. Además, los niños que carecen de lazos emocionales en sus primeros años tendrán dificultades relacionándose con sus pares.
Mientras los niños crecen, la crianza afectiva por parte de sus padres y otros proveedores de cuidado sigue siendo importante para un saludable desarrollo físico y emocional. Los padres apoyan el desarrollo de sus hijos mayores cuando toman el tiempo de escucharlos, se interesan y se involucran en las actividades de su hijo dentro y fuera de la escuela, se mantienen conscientes de los intereses y los amigos de su hijo o adolescente e interceden por ellos cuando es necesario.
Bloque 2: Tema del día: Tres factores de protección:
1. Crianza afectiva y apego
2. Conocimiento sobre la crianza de los hijos y el desarrollo de los niños
3. Resiliencia de los padres
Cómo pueden ayudar los programas
- Usando las estrategias de educación para los padres (talleres, bibliotecas públicas) como oportunidades de compartir información sobre cómo un fuerte vínculo entre padres e hijos mejora el desarrollo cerebral y alienta comportamientos positivos en los niños jóvenes
- Educando a su personal sobre la crianza y el desarrollo de los niños para que puedan ofrecerles a los padres un entrenamiento más eficaz sobre estos asuntos
- Compartiendo los recursos disponibles de su agencia y de la comunidad sobre cómo los padres pueden cuidar y conectarse con sus hijos a cualquier edad.
- Involucrando e incluyendo a todos los adultos importantes en la vida de un niño, incluyendo al padre, los abuelos y familia extendida, para formar parte de la “red de crianza afectiva” del niño.
- Reconociendo las diferencias culturales con respecto a las maneras en que padres e hijos demuestran afecto.
- Reconociendo que cuando un hijo no reacciona de manera positiva a su madre o padre (a causa de una discapacidad emocional, de desarrollo o de comportamiento, por ejemplo), la madre o el padre puede necesitar apoyo adicional.
Cómo pueden ayudar las personas que ofrecen servicios
Hasta unos pocos minutos de tiempo de calidad, sea en el auto, en una tienda o mientras cocinan la cena, significan mucho para un niño. Su papel como compañero de los padres es inspirar comportamientos cariñosos y reconocerlos en los intentos de los padres en conectar con su bebé, niño o adolescente. También puede destacar ejemplos de interacciones positivas entre el padre o la madre y su hijo para reafirmar el comportamiento demostrado. Algunos padres han decidido comunicar la importancia de la crianza afectiva y el apego sencillamente diciendo: “Nuestra familia se demuestra cuánto nos queremos mutuamente.”
Conocimiento sobre la crianza de los hijos y el desarrollo de los niños
Es más probable que los padres con conocimiento del curso usual que toma el desarrollo de un niño puedan proveerles a sus hijos comunicaciones respetuosas, reglas y expectativas consistentes, límites apropiados para su nivel de desarrollo y oportunidades que promuevan la independencia. Sin embargo, ningún padre puede ser un experto en todos los aspectos del desarrollo infantil, de niños y de adolescentes o sobre las maneras más eficaces de apoyar a un niño en cada etapa de su vida.
Los padres pueden frustrarse y recurrir a castigos severos cuando no están conscientes de las etapas normales del desarrollo, cuando interpretan los comportamientos de sus hijos de manera negativa o cuando no saben reaccionar a y manejar los comportamientos de un niño eficazmente.
En cuanto los niños crecen y maduran, sus padres también deben seguir fomentando sus propias habilidades de crianza, aprendiendo sobre y reaccionando a las necesidades emergentes de los hijos. Pueden encontrar información sobre el desarrollo de niños y la crianza de los hijos a través de varias fuentes, incluyendo otros parientes y miembros de la familia, prácticas culturales, los medios de información, la educación formal para los padres o un ambiente escolar positivo que apoya a los padres.
Las interacciones con otros niños de la misma edad que sus hijos también pueden ayudar a que padres entiendan mejor a sus propios hijos. Los padres también pueden aprender sobre alternativas saludables observando a otros proveedores de cuidado que usan técnicas positivas para manejar los comportamientos de los niños.
Los estilos de crianza deben ser ajustados al temperamento y las circunstancias únicas de cada niño. Los padres de hijos con necesidades especiales podrían beneficiarse de ayuda y apoyo adicional para reducir su frustración y ayudarlos a ser los padres que sus hijos necesitan.
Resiliencia de los padres:
Los padres que pueden enfrentar el estrés cotidiano como también la crisis ocasional tienen resiliencia—la flexibilidad y la fuerza interna de recuperarse cuando pasan por dificultades en sus vidas. Los padres con resiliencia también saben cómo buscar ayuda cuando la necesitan. Sus habilidades de enfrentar y manejar los altibajos de la vida sirven como modelo de conductas de adaptación para sus hijos. Esto puede ayudar a los niños a aprender habilidades cruciales de autorregulación y resolución de problemas (factores de protección a nivel individual).
Los factores que causan estrés en la vida, como una historia familiar de abuso o negligencia, problemas de salud física o mental, conflictos matrimoniales, abuso de sustancias y violencia comunitaria o domestica—y también el estrés financiero como el desempleo, la inseguridad financiera y la falta de vivienda—pueden reducir las capacidades de un padre o una madre de manejar eficazmente el estrés cotidiano típico de criar hijos. En cambio los factores de protección a nivel comunitario, como un ambiente comunitario positivo y oportunidades económicas, pueden mejorar la resiliencia parental.
Todos los padres tienen fuerzas internas o recursos que les pueden servir de base para fortalecer su resiliencia. Estas pueden incluir su fe, su flexibilidad, el humor, sus habilidades de comunicación, sus capacidades de resolver problemas, relaciones en las que las personas se apoyan mutuamente y con cariño o el saber identificar y acceder a recursos y servicios externos cuando se necesiten. Todas estas cualidades fortalecen sus capacidades de ser padres eficaces, y pueden ser fomentadas y desarrolladas a través de actividades de capacitación o interacciones con otras personas que los apoyan.
Bloque 3: Nuestros niños
- ¡Fiesta! – Cumpleaños de mayo
- Gisel – 4 de mayo
¡FELIZ CUMPLEAÑOS!
Les invitamos a mandar los nombres de las personas que quieran felicitar por su cumpleaños durante el mes de marzo, felicitaremos a los cumpleañeros en cada programa y el final del mes todos los que están en la lista, participaran en una rifa.
- Cuéntame un cuento:
El castigo más tonto, por Pedro Pablo Sacristan
Hubo una vez un rey que quedó huérfano siendo niño y creció rodeado de militares y consejeros que hicieron de él un rey poderoso y sabio, pero insensible. Por eso se cansaba cuando la gente hablaba con pasión de sus madres. Y a tal punto llegó su enfado que decidió darles todo el poder.
– Pues si tan buenas son las madres en todo, que gobiernen ellas. A ver cómo lo hacen.
La noticia fue recibida con gran alegría por todo el mundo, pero resultó ser un fracaso estrepitoso. Las cosas iban tan mal que el rey tuvo que recobrar el mando al poco tiempo. Y cuando pidió a sus consejeros que averiguasen qué había fallado, estos concluyeron que las madres siempre habían dado más importancia a los problemas de sus propios hijos que a los del reino. Y así, llegaban tarde a importantes reuniones cuando sus hijos estaban enfermos, aplazaban los juicios para acudir a recogerlos al colegio, y mil cosas más.
Al oírlo, el rey se puso tan furioso que castigó con el destierro a todas las madres del reino.
– La que quiera seguir haciendo de madre, que se vaya.
Y no se quedó ni una.
Poco después, a pesar de su vuelta al gobierno, el reino iba aún peor. Preguntó de nuevo a sus consejeros y estos, tras estudiar el asunto, respondieron:
– La falta de madres ha creado un enorme problema de nutrición que está hundiendo al reino. Eran ellas las que hacían la comida.
– De acuerdo. Contratad un ejército de cocineros – dijo el rey.
Pero tras contratar miles de cocineros, las cosas no mejoraron. Esta vez los sabios encontraron una nueva razón para el desastre:
– La falta de madres ha creado un enorme problema de higiene que está hundiendo al reino. Eran ellas las que limpiaban.
– No hay problema ¡Contratad un ejército de mayordomos! – respondió el rey, muy irritado.
Pero tras contratar a los mayordomos, las cosas siguieron igual. Una vez más los sabios creyeron encontrar la causa:
– La falta de madres ha creado un enorme problema de salud que está hundiendo al reino. Eran ellas las que curaban las pequeñas heridas y ahora todas se infectan y se vuelven graves.
– ¡¡Pues contratad un ejército de enfermeros!! – gritó furioso el rey.
Pero los miles de enfermeros contratados no mejoraron nada. Y tampoco los economistas, sastres o decoradores. Ni siquiera el descubrimiento de grandes minas de oro que permitieron al rey contratar cuantas personas quiso. No encontraba la forma de sustituir totalmente a las madres.
Hasta que un día, mientras paseaba, vio discutir a unos niños. Los había visto jugar mil veces como amigos, pero ahora discutían con tanta ira y desprecio que el rey se acercó para calmarlos.
– Tranquilos, chicos. Los amigos deben tratarse con más cariño ¿Es que por una sola pelea vais a dejar de quereros?
Los niños, avergonzados, detuvieron la pelea y se marcharon cabizbajos. Mientras se alejaban, el rey les oyó susurrar.
– Oye, ¿tú sabes qué es eso de quererse? – dijo uno.
– Sí, claro, es un invento muy moderno de un amigo de mi abuelo – respondió el otro haciéndose el experto – Nos lo enseñarán en la escuela dentro de un par de años.
El rey lo comprendió todo en un instante. Ahí estaban todos los problemas del reino: ¡nadie estaba enseñando a los niños lo que eran el amor y el cariño! Entonces pensó en quién contratar para hacer esa labor, pero no encontró a nadie: era algo que siempre habían enseñado las madres, y en eso nadie podría sustituirlas.
Y arrepentido por su injusticia y dureza de corazón, mandó buscar y contratar a todas las madres que había expulsado, pagándoles un altísimo salario solo por hacer de madres. Y en poco tiempo el reino resolvió sus problemas y superó ampliamente su antigua prosperidad.
Pero algunos tampoco tardaron tiempo en protestar al rey por estar pagando un salario a quienes harían gratis su trabajo de madres. Y el rey, para refrescarles a todos la memoria, decidió retirar su rostro de todas las monedas del reino, y sustituirlo por la imagen de una madre con su hijo, y una inscripción que decía:
“Ni este ni ningún reino serían nada sin el amor de sus madres.”
- Entre padres y educadores… consejos y reflexiones
El mejor regalo que podemos dar a nuestros hijos…
- Amor incondicional
- Tiempo
- Buen ejemplo
- Educación
Inteligencia emocional
Si definimos “inteligencia emocional” como “la habilidad de observar los sentimientos y emociones propios y ajenos, distinguir entre ellos y usar esa información para orientar nuestros pensamientos y nuestros actos”, parece ser que ser madre la pone a prueba cada día. Tanto practicar y practicar, al final se aprende. Parece que el ser madre ayuda a la comprensión emocional de los otros.
Así es que, según la evidencia, el cerebro de la mujer se halla en uno de sus momentos más plásticos (es decir, momentos de más crecimiento neuronal y mayores conexiones entre neuronas), durante la maternidad. Nada más lejos de volverse tonta.
Seguramente, la mente de una madre no está para memorizar o acordarse de ciertos detalles que son superfluos en comparación con cuidar de su bebé, su cerebro está muy ocupado. Tiene un objetivo de mayor trascendencia: criar a un ser humano.
Bloque 4: Hasta la próxima
- Despedida – Esto es todo por hoy, gracias por su participación, le esperamos el próximo miércoles a las 10:00 de la mañana para juntos….
¡APRENDER Y CRECER!
Fuentes de Información utilizadas para este programa
Las manos de mi madre: http://www.ciudadseva.com/textos/poesia/ha/espino/las_manos_de_mi_madre.htm
Cuento – El castigo más tonto http://cuentosparadormir.com/infantiles/cuento/el-castigo-mas-tonto
FRIENDS ha desarrollado una encuesta exhaustiva para ayudar a los programas a medir cambios en los factores de protección familiares con fines de evaluación y la mejora continua. Para más información, visite: http://friendsnrc.org/protective-factors-survey